El artículo tiene como objetivo analizar la dinámica violenta en Buenaventura-Colombia, como parte de la necropolítica implementada por el Estado en la cual diversos actores armados ilegales y sus repertorios de acción –terror y muerte– se establecen como medios para controlar a la población. Este análisis se orienta a través de la perspectiva teórica de Aníbal Quijano sobre “La colonialidad del poder” y la visión de Achile Mbembe sobre “Necropolitica”. Metodológicamente, la indagación utilizó un enfoque cualitativo basado en el análisis del periódico El País, el portal Verdad Abierta y los informes para el Desarrollo y Paz (INDEPAZ), durante los años 2010-2019. Se concluye que el contexto sociopolítico de Buenaventura es un ejemplo patente de la relación existente entre la modernidad, el terror y la muerte, por cuenta de un sistema de dominación en el que confluye la clasificación étnica-racial y de clase social de sus habitantes.